El torreón de los espíritus

  En esta ocasión nos hemos trasladado a uno de los municipios más elevados de Catalunya, a más de 1400 metros de altitud, para mostraros este increible paraje.

Trasmoz

La localidad de Trasmoz pertenece a la Comarca de Tarazona y el Moncayo y está situada a 84 Km. de Zaragoza y 765 metros de altitud.
Su término tiene una superficie de 18.3 kilómetros cuadrados y cuenta con una población aproximada de 76 habitantes, a los que se conoce con el gentilicio de Trasmocero.
Comprende las entidades de población de Trasmoz.
El legendario castillo de Trasmoz cuyas partes más antiguas, torre central hoy restaurada y aljibes, datan del siglo XII, al que se añadieron los recintos exteriores en el siglo XIII (algunas de las historias de brujerías y aquelarres que supuestamente se realizaban en este lugar fueron recogidas en sus escritos por el escritor Gustavo Adolfo Bécquer).
La Iglesia parroquial de la Virgen de la Huerta fue construida a mediados del siglo XVI y es obra de estilo gótico renacentista, aunque todavía conserva el crismón románico en la entrada principal.

El jardín de las 50 tumbas

         En esta ocasión, dirigimos nuestra experimentación hacia un lugar con una leyenda negra.
En una carretera de nuestra localidad, en otoño de 1993, cuatro jóvenes regresan a casa a altas horas de la madrugada, durante el trayecto, en una curva, ven la silueta de la sombra de una mujer, vestida con ropas de campesina de época, haciendo el gesto de detener el coche. Ese tramo de carretera es conocido por su alta concentración de accidentes, un punto negro. Cuando quisieron mirar por el retrovisor, la mujer había desaparecido. Quizás una advertencia para que tuvieran cuidado? o es otra leyenda más de apariciones de carretera?... Se relaciona la aparición con una iglesia en la que hay tumbas en su jardín y un restaurante en el cual, se cuenta que ocurren fenómenos paranormales, como la aparición de una mujer en los servicios y en la terraza que tiene unos porticones de madera muy antigua con un pasamanos de hierro, que al cerrarlo por las noches, al día siguiente se lo encuentran abierto. El 17 de marzo de este mismo año, realizamos una experimentación psicofónica en estas inmediaciones, con el fin de encontrar alguna evidencia. No vamos a revelar ningún nombre de las ubicaciones para mantener la privacidad.

Roden viejo. (Ruta aragonesa)

         La primera parada en nuestra ruta por Aragón, fue en el pueblo abandonado de Rodén viejo.

                                                Historia del pueblo:


Esta localidad, perteneciente al cercano municipio de Fuentes de Ebro, se encuentra en la margen derecha de la rica vega del río Ginel, pequeño arroyo que nace cerca de la ermita de María Magdalena y muere a los pocos kilómetros en el Ebro, no sin antes regar una preciosa huerta, que resalta entre el pelado y árido entorno que la rodea, con aguas que poseen la propiedad de endulzar las cebollas de la zona (eso dicen) y de acelerar el desarrollo de las hortalizas. Tengo que confesar que en mis visitas nunca he visto sus aguas, desatino que hoy hago propósito de enmendar para admirar como “con tan poco” se puede “crear tanto”.



En sus inmediaciones encontramos buenas canteras de alabastro que en tiempos sirvieron para la construcción de las viviendas que formaban el pueblo viejo, donde cabe destacar los restos de la antigua fortaleza y de la iglesia parroquial de San Martín, una interesante obra de clara raíz mudéjar. Trinchera que todavía llega de Rodén a Fuentes de Ebro.

Al igual que las localidades de su entorno, ésta sufrió mucho durante la Guerra Civil y hoy todavía se siguen apreciando sus efectos como muestra el pueblo viejo arriba, en lo alto del monte, donde sólo hay ruinas y podemos encontrar trincheras que bordearon los montes dominando todo el valle del Ginel y del Ebro.

El antiguo pueblo se recorta sobre el horizonte y la luz se cuela por los agujeros de las paredes de piedra gris y blanca. Ni tejados, ni puertas, ni ventanas. Se nota que por allí pasó la guerra. Pero no fueron las bombas, sino los hombres los principales causantes de su destrucción al desmantelar todo el pueblo para hacer fortificaciones en el sangriento frente de Belchite.

Podríamos decir que quedó en ruinas durante la guerra sin combates, a causa del furor destructivo de las fuerzas de ocupación.

En el pueblo viejo llegaron a quedar tan sólo seis o siete viviendas cuando la guerra, las que empleaban los altos mandos. Después no pareció rentable levantar los nuevos edificios sobre las ruinas de los antiguos.

Rodén conservó sus piedras antiguas, nada más, agonizó como los restos de su viejo castillo y hasta llegó a sentir los estertores de la muerte.

El nuevo pueblo se levantó al pie de las ruinas, a la sombra del pasado, mejor emplazado pero menos pintoresco, en la vega y a la orilla de la carretera.

Uno piensa que los habitantes de un pueblo así tienen que ser felices, a pesar de que no pueden curar su nostalgia porque las ruinas, en lo alto, están llenas de recuerdos y porque el pasado les acecha constantemente.

“La Guerra Civil fue demasiado sangrienta y destructiva para describirla con palabras….”.



extraido de Fuentes de Ebro, ayuntamiento.

Cementerio de Les Corts

El cementerio barcelonés de Les Corts fué inaugurado en el año 1897 , época en la cual se encontraba fuera del casco urbano. Actualmente se encuentra rodeado entre la zona universitaria y el campo del Barça.                                                                                                                                                 

Un ambiente de gran tranquilidad, pero a la vez, una atmósfera cargada de misticismo, hace de nuestra visita un cúmulo de sensaciones, momentos de paz, de tristeza, de serenidad...                                                      

                                                                                                                                                

Cementerio de Carcassonne

En nuestra visita a la ciudad fortificada de Carcassonne, no pudimos pasar por alto este espectacular y bello cementerio. Aquí os dejamos nuestra galería de fotos.

Colonia Soldevila parte 1

A finales del 2011, tuve el placer de visitar uno de los abandonos mas bonitos que he podido ver en todo el tiempo que llevo en este mundillo, Una antigua colonia textil, que en aquel año estaba prácticamente ajena al vandalismo y oportunistas. En la actualidad, está completamente cerrada y custodiada por un vigilante. Una verdadera lástima en todos los aspectos, por que era el sitio ideal para fotografiar y experimentar el fenómeno de las psicofonías, ya que allí mismo han sido numerosos los registros que hemos obtenido y algunas de muchísima calidad. Quiero recalcar que en este enclave, no se conocen tragedias, muertes y demás como algunos han ido contando por allí, los únicos datos que existen son sobre su historia, construcción y fechas, nada mas. Aquí os dejo un poco de su historia.

Cementerio de poblenou

El cementerio de Poble Nou, también llamado "Viejo" o "del Este", fue el primero de la ciudad de Barcelona. Aunque ahora se encuentra integrado en la metrópoli, fue la primera gran necrópolis de España que se construyó alejada de la ciudad, adelantándose así a la primera legislación española que ordenaba el entierro fuera del núcleo urbano.
El cementerio del Obispo Climent
El cementerio de Poble Nou tuvo dos grandes etapas. La primera fue su creación original, en 1775. Por orden del Obispo Climent se construyó una necrópolis alejada de la ciudad, en una zona despoblada de uso agrícola. La razón: la insalubridad que causaba inhumar los cuerpos en las parroquias, práctica habitual sobre todo entre las personas distinguidas. Pero las fosas de las parroquias comenzaban a saturarse, y en ese tiempo, Barcelona aún era una ciudad con murallas. Comenzaba a crecer demográfica y económicamente. La densidad creciente de población y la falta de infraestructura (no había agua corriente ni red de cloacas, por ejemplo) creaban grandes problemas de salud, que se veían agravados por las prácticas tradicionales de enterramiento (en Barcelona había siete parroquias donde se inhumaban los cadáveres, pero también se enterraba en templos y claustros de iglesia). Hoy esas "fosas" son plazas públicas.

The Assylum

Nos adentramos en este "megageriátrico", fascinados por sus grandes dimensiones, edificio majestuoso, que ha quedado deslustrado por el paso de vándalos y chatarreros. Espacio que hace pensar en todas las historias alli contadas, en todas las vidas que allí albergaron sus últimos dias.

La iglesia oculta

  En esta ocasión os hacemos partícípes de nuestra visita a un lugar muy marcado por acontecimientos oscuros y macabros.
  Conocimos el lugar y su historia de la mano de nuestro amigo Luis, quien aportó copiosa información del enclave. Echos documentados por testigos, guardia civil y el médico forense que practicó la autopsia del sacerdote allí fallecido un siglo atrás.
  Esta iglesia, prácticamente oculta y con aspecto de masia en una de sus vertientes, era escenario de numerosas manifestaciones paranormales, lo que conllevó a su clausura y desacralización, es decir, su desvinculación de la Iglesia, al asegurar que la zona era dominio del Maligno.
  Según testimonios de la Guardia Civil, el sacerdote hizo caso omiso de la prohibición de llevar a cabo actos religiosos allí dentro, y para evitar el desplazamiento de los feligreses, decidió volver a impartir misa en el lugar. Varios testigos afirmaron haber visto al párroco levitar y sangrar por los oidos, y caer con fuerza hacia el suelo, el informe forense determinó una muerte por derrame cerebral, algo normal, pero el hecho de que se elevase antes de caer avivó la leyenda negra del lugar.
  A todo esto se le añaden múltiples profanaciones, en las cuales los cadáveres aparecieron sin cabeza. El fin de estos actos era económico, puesto que se demostró que los profanadores recibían recompensas económicas por parte de alguien que impartía estudios en medicina.
  Os dejamos nuestro reportaje fotográfico que comprende iglesia y cementerio.

Investigación realizada por Óscar J. Escobar, Iván Campos, Javito Alonso y Raquel Martínez

Agradecimiento especial a Luis

Redactado por Raquel Martínez

Fotografía: Raquel Martínez